Rincón Popular

Lugar de encuentro para afiliados y simpatizantes del Partido Popular de España en Estados Unidos.

07 abril, 2008

Confiando en las Instituciones

Nos enteramos hoy por El Mundo de la oferta política que el PSOE hizo a ETA por la cual se iría hacia un vaciamiento de las instituciones forales en el País Vasco y Navarra y una eventual nueva autonomía de las cuatro provincias a cambio de una parada del terrorismo. El aspecto terriblemente antidemocrático de esta oferta, hecha a espaldas de vascos, navarros, y demás españoles no sólo demuestra un sentido coyuntural de la ética (demostrable por la actitud cambiante, modificable, interesada, libre de toda continuidad en la aplicación de la ley a ANV) sino también la continua falta de visión de estado y de nación española que afecta al zapaterismo que ahora domina en el PSOE.

No es desdeñable la impresión que se recibe de que la impunidad de ANV o las negociaciones con ETA no se ven con mucha importancia por el gobierno de la nación porque, a fin de cuentas, la aplicación de las leyes o el estatus de las instituciones siempre se pueden modificar dependiendo de por donde esté la necesidad del gobierno de turno. Si es necesario, se aprietan las tuercas y empiezan las acciones judiciales o se refuerzan las instituciones. Si es conveniente, se rebaja la presión judicial o se cambia el marco legal a cambio de la colaboración en negociaciones opacas a la sociedad que determinen el reparto de poderes e influencias. Mal está cuando esto se hace entre organizaciones con legitimidad democrática, legitimidad que se pierde en gran parte al actuar al margen de la ley, si no contra la ley, al menos con una aplicación selectiva y arbitraria. Cuando estas negociaciones se hacen con terroristas u organizaciones dependientes como en estos casos, esta actitud y subordinación y falta de independencia del poder judicial y legislativo afectan la salud de nuestra democracia de manera profunda y producen desasosiego y hastío en la ciudadanía que se reflejan en una pérdida de confianza en las instituciones.

Es potestad del gobierno de turno negociar con quien vea conveniente y los silencios y prudencia en la negociación deben ser parte fundamental en las discusiones de Estado. Pero hacer propuestas y ofrecimientos, en particular a una banda terrorista, que representan un cambio tan fundamental de la legalidad constitucional y una aproximación tan cercana a las exigencias de una banda criminal, que solo desde su maximalismo impidió al gobierno acordar esta indignidad, es una razón añadida de preocupación sobre lo que cuatro años más de zapaterismo nos pueden traer a nuestro país. Como español, que no como miembro del Partido Popular, uno podría desear que el zapaterismo se hiciera mayor y hubiera aprendido de sus veleidades con ETA y su obcecación en el aislamiento de la mitad de la nación y el sectarismo de sus actuaciones sobre todo en cuestiones de Estado. Pero esta noticia de hoy, aparte de los comentarios del ministro de Justicia Mariano Fernández Bermejo sobre la liberación del GRAPO asesino o de la falta de vencidos en una huelga judicial que ha afectado a muchísimos españoles nos hace temer que esta mayoría de edad no es algo que esté ni cerca ni se pueda vislumbrar con confianza.

CARLOS MONTERO LUQUE (CAMBRIDGE, MA)